Con intenciones de una noche tranquila [Axel] +18

*Cuando dejo de penetrarme me giré para mirarle y vi como se levantaba los pantalones. Abrí la boca, este chico me había leído la mente seguro. Le fulminé con la mirada mientras cogia mi sujetador poniéndomelo y subiéndome el vestido colocándomelo bien. Me arreglé el pelo y corrí hacia él. Le quité las llaves y entré en el coche sentándome en el asiento del copiloto. Me puse el cinturón y encendí mi móvil y nada mas se encendió me llegó un mensaje con las llamadas perdidas. Unas 15 de mi madre y 5 de J.*
-Estas muerto por hacerme esto Axel, que lo sepas.
*Dije mirándole mal mientras me cruzaba de brazos como una niña pequeña y encoma de dolía el trasero.*

off: ya, ya...¬¬. XDXD

Sonreí y entré en el coche. Y suerte que lo había abierto antes que ella, porque sino, era capaz de haberme dejado allí fuera, empapándome. Esperaba que no se hubiera enfadado de verdad... porque si el juego terminaba ahora, sería aburrido. Nada más sentarme en el asiento, lancé la camiseta al asiento de atrás y desabroché su cinturón con un gesto medido.

- Vamos... vamos...¿ ya no te divierto...? -dije sonriendo, pasando una mano por su cuello, y depositando un beso en él- Tú has jugado conmigo siempre que te ha venido en gana... -cogí su móvil, y lo dejé sobre el salpicadero- ¿No me toca a mí...?



(OFF: msn?)

*Cerré los ojos cuando deposito un beso en mi cuello sintiendo un escalofrío recorriendo mi cuerpo. Era imposible enfadarme con él si encima me besaba en el cuello. Seguí con la mirada a mi móvil que se quedó encima del salpicadero y soltando un suspiro miré a Axel con una sonrisa*
-Pero yo no te he dejado nunca con un calentón listo. Y luego la infantil, inmadura y cría soy yo. Pues tu lo eres mas que lo sepas.
*Le saqué la lengua como una niña pequeña y después me eché hacía adelante para besar su pecho.*

- Pero te vuelvo loca... -sonreí y pasé la mano por su entrepierna, la calidez se notaba a través de la ropa- ¿A que sí?

Era increíble. Con otra chica, si hubiera hecho, tal vez me había llevado una bofetada bien sonora y dolorosa. Con Mary, lo que había conseguido, era un beso en el pecho, que daba pie a cualquier cosa. Cada vez me gustaba más. Más y más.
Empecé a besarla de nuevo, bajando su vestido por los hombros mientras mi otra mano seguía en su entrepierna, menos bruscamente que antes, en el árbol.

*Tragué saliva al sentir como pasaba su mano por mi entrepierna y asentí con la cabeza lentamente ante su pregunta. Si que me volvía loca, quizás demasiado pero yo ya estaba un poco loca de por si. Correspondí a su beso con intensidad mientras sentía como bajaba los tirantes de mi vestido, me había echo colocármelo bien para nada… Cogi su muñeca con una de mis manos y aparté la mano que estaba en mi entrepierna y me separé de él subiéndome los tirantes y le dediqué una inocente sonrisa.*
-Anda, arranca y déjame a mi.
*Mi mano fue hasta el botón de su pantalón desabrochándoselo.*

Sus manos condujeron las mías, y lo agradecí. Esperaba que fuera para bien, yo también tenía un calentón importante y no quería que decayera.
Obedecí su deseo y arranqué el Mini. Encendí los faros, que dibujaron las gotas que caían en el prado. Era muy bello, pero no podía entretenerme a observarla. Y menos si los dedos de Mary jugueteaban en mis pantalones, más difícil era.

- Soy todo tuyo... -dí marcha atrás, esperando a ver que hacía.

*Sonreí divertida al escucharle y bajé su cremallera y después saqué su miembro de dentro del boxer y le miré con una perversa lasciva y le besé en el cuello mordiéndole con fuerza.*
-¿Qué te parece si sigo por lo que íbamos antes del castigo?
*Le susurré al oído de forma provocativa. Me incliné hacía adelante metiéndome su miembro en mi boca y empezando a mover la cabeza*

- Oooh... joder. -Tragué saliva y casi estrello el coche contra una de las vallas que limitaban con la carretera.

Cómo pude, con esos labios alrededor de mi pene, enderecé el vehículo y lo enfilé en dirección a mí casa. Era complicado concentrarse en la conducción, suerte que a aquella hora no había apenas tráfico. Miré el reloj para comprobarlo, la 1.42. Tarde, tarde, pero la noche era joven para nosotros.
Cambié de marcha y puse una mano en su cabeza, apartándole el pelo que de seguro la molestaba. Si lo hacía, que lo hiciera cómoda. Sentí su lengua jugar con la punta de mi miembro. Y solté un pequeño gemido, recé para que no nos parase la policía.

Iba sin camiseta, y con Mary, haciéndome...
Y con Mary.

*Cerré los ojos con fuerza al sentir como el coche derrapaba y cuando Axel lo controló sonreí divertida y empecé de nuevo a mover mi cabeza de nuevo lentamente aumentando el ritmo cada pocos segundos para volver a bajarlo al rato. Mis manos acariciaron con lentitud su tripa desnuda clavándole las uñas sin mucha fuerza. Axel me apartó el pelo para que estuviese mas cómoda y le di un pequeño mordisco en su miembro pero despues pase la lengua por ahí.*
-Tu centrate en la carretera.
*Dije quitándome un instante su miembro de mi boca pero despues de decir esas palabras me lo volví a meter*

El ligero mordisco parecía un bajo precio por todo el placer que me estaba causando. No recordaba haber hecho nada igual. Nunca, nunca mientras conducía, eso seguro. Golpeé el volante, de puro gusto, y reprimí un gemido, que me hizo dar un ligero volantazo, pasando la parte izquierda del coche por otro carril.

Dicho y hecho, antes lo hubiera pensado... La policía estaba haciendo un control en una rotonda, el único tiempo que tenía para vestirme y parar a Mary era la pequeña cola que se había formado delante del policía que daba el paso.

- Joder, joder... espera, que tenemos problemas. -reduje la marcha todo lo que pude y traté de coger mi camiseta- ¡Ayúdame! -dije, algo apurado.

*Me reí al sentir como el coche se desviaba y seguía a lo mío hasta que escuchar a Axel decirme que tenemos problemas. Eché mi cabeza hacia arriba observando a la policía y me relamí los labios mientras le abrochaba el pantalón a Axel. Como iba sin cinturón me di la vuelta y cogi la camiseta de Axel riéndome sin poderlo evitar. Se la tiré a la cabeza y me senté en el asiento de nuevo. Me alisé el vestido y me puse el cinturón y después me arregle bien el pelo y puse cara de niña buena.*
-Axel tranquilo, ponte la camiseta y intenta controlar tu respiración y sobre todo…que no te miren aquí abajo o pensaran que llevas una pistola.
*Mi mano acaricio su bulto y con una inocente sonrisa y aparté la mano con rapidez*

Logré ponerme la camiseta justo un minuto antes de llegar ante el policía, aunque la erección no bajaba, era imposible, en mi cabeza rodaban las imagenes mías y de Mary revolcándonos en el bosque, en la cama, en el trabajo. Aunque quisiera, no hubiera podido relajar el calentón.

- No, si tranquilo estoy, pero me hubieran clavado una buena multa si... -reí- Se enteran de que voy conduciendo mientras practico actos sexuales.

Instantes después, el agente me paró. Se acercó a mi ventanilla y con una linternita enfocó la cara de Mary y la mía, mirándonos a través de sus oscuras gafas. Sonreí ante el destello de la luz y lo miré cómo pude.

- Buenas noches, agente.
- Buenas noches. -dijo, sin apartar la linterna- Documentación.

-¿Una buena multa? ¡Que va! Seguro que nos hubiese pedido mirar.
*Dije bromeando divertida. Observé como se ponía la camiseta tapando su cuerpo perfecto con las marcas de mis arañazos y puse unos pequeños pucheros como una niña pequeña. Giré mi cabeza y entrecerré los ojos a causa de la luz. Rodé los ojos al escuchar lo de la documentación y me quité el cinturón y me di la vuelta en el asiento cogiendo mi bolso y me volví a sentar bien. Me coloqué de nuevo bien el vestido y empecé a rebuscar por el bolso, ahora que pensaba no sabía si lo había cogido.*

Saqué la cartera del bolsillo trasero de mis pantalones y le dí mi carnet de conducir. Antes que darle el pasaporte, así ya no me pediría las dos cosas. Me volví hacia Mary, y un pequeño hilo de preocupación recorrió mi rostro al darme cuenta de que rebuscaba algo frenéticamente por el bolso. Si se la llevaban por ir indocumentada, o le ponían una multa, tendría que ir con ella o dar parte cómo responsable de ella... y eso no era bueno.

- Dime que no te has olvidado del carnet... -susurré, tratando de que el policía no me oyera.

-No me agobies que esto es peor que el bolso de Mary Poppins.
*Dije mirando a Axel. Volví a mirar hacia el bolso y después de un buen rato encontré el carnet y solté un suspiro de alivio. Le pase mi carnet al policía y volví a acomodarme e el asiento. Cogi el móvil y lo guardé en el bolso tirándolo de nuevo hacía atrás y subí los pies al salpicadero estirándome la falda hacia abajo.*
-Ves como no había que preocuparse por nada que no fuese tu entrepierna?
*Dije en voz baja riéndome divertida*

Tomó los documentos y en silencio se dirigió hacia el coche patrulla, supongo que a comprobar si estaba todo en orden. Debía ser rutinario, de lo contrario nos habría hecho salir del coche, a cachearnos y demás. Bueno, mejor no tentar a la suerte, no fuera a ser...

La lluvia seguía cayendo, el policía llevaba un extraño chubasquero que le cubría el cuerpo y alcanzaba hasta la gorra, era algo cómico. Me volví a Mary para mirarla con los ojos entrecerrados en un gesto de sana molestia.

- Eres muy muy graciosa, ¿lo sabías? -me coloqué el pantalón, la erección empezaba a ser molesta dentro de él- A ver si al final te quedarás sin postre... -sonreí, observando al agente mientras éste tecleaba en su ordenador de a bordo.

*Seguí con la mirada al policía y después miré a Axel con una divertida e inocente sonrisa y estiré mi mano acariciando su entrepierna por encima del pantalón.*
-Ahora es cuando vuelve el policía y tu botón sale disparado y le da en el ojo entonces te hacen bajar y al ver tu entrepierna piensan que es una pistola y te cachean mientras yo me rió dentro del coche…sería una escena divertida de ver.
*Mi móvil empezó a sonar de nuevo pero lo ignoré.*
-Por cierto, ¿te he dicho alguna vez que tengo antecedentes? Nada grave, me colé una noche en el centro comercial con unos amigos para tirarnos por las escaleras mecánicas con una colchoneta.
*Le expliqué sin dejar de acariciar su entrepierna*
-Y a mi me da igual quedarme sin postre, se me ha pasado el calentón pero a ti...

- Ja Ja. Pues que sepas que testificaré en tu contra, malcriada. -dije sonriéndole, mientras le apartaba la mano.

El policía volvió con los carnets y con una prueba de alcoholemia. Suspiré ante eso. No había bebido más que la cerveza en casa de Mary, eso no daría positivo, pero era un control era tedioso, además con aquella lluvia, al menos se dignaría a traerme un paraguas.

- Empezaré a mosquearme con tu amigo... -reí y la miré con los ojos muy abiertos, falsamente impresionado- Uh, que peligrosa... no me robes nada, ¿eh? -me quité el cinturón, viéndo llegar al guarda, y le susurré- Claro, ya lo veremos.

- Por favor, sople aquí, si es tan amable. -el tono seco del hombre me sacó de mis cosas.

-Yo no te robaré nada por que ya me conformo con ser tu perdición por que eso es lo que soy, tu perdición.
*Dije dedicándole una de mis encantadoras sonrisas. El policía volvió y le pidió a Axel que soplase en un tono muy seco y hablé sin pensar*
-Si quiere que nosotros seamos amable con usted antes séalo usted con nosotros.
*Le dije mientras tiraba mi carnet hacia la parte trasera del coche. Seguía con los pies en el salpicadero y entonces me giré hacia el policía y le dediqué una inocente y aniñada sonrisa*
-Bueno, es lo mínimo que puede hacer. Ya sabe…trate a los demás como le gustaría que le tratasen a usted.

El policía se fijó en ella mientras yo soplaba, y yo me lamenté interiormente. A veces, Mary no podía tener la boquita cerrada. Se quitó las gafas con un suspiro, pero no dijo nada. Supuse que no era la primera chica respondona con la que se encontraba.
Terminé de soplar y dió 0.00, lo esperado.

- Muchas gracias. -guardó el aparato en uno de los bolsillos de la chaqueta- Aunque de todos modos he de pedirle que baje del vehículo para un control rutinario. -sacó un paraguas muy pequeño, también de la chaqueta. Seguro que era una pequeña venganza a los comentarios de Mary.

- Gracias... encanto. -le dije a Mary, dedicándole una sonrisa de "te vas a enterar".

-De nada cariño.
*Dije divertida dedicándole una sonrisa mientras le despedía con la mano. Mi mirada se poso en su entrepierna y mi sonrisa se ensanchó, eso iba a ser divertido de ver. Me acomodé mejor en el asiento mientras observaba al policía con una inocente sonrisa jugando con un mechón de mi pelo.*
-Oiga señor, no le meta mano o se sorprenderá de lo que le puede hacer.
*Dije conteniéndome la risa mientras seguía con mi inocente sonrisa mirando a Axel divertida sin poderlo evitar. Eso le pasaba por haberme dejado con el calentón en el río, se lo merecía aunque sabía que después se iba a vengar pero en ese momento me daba igual, me lo estaba pasando demasiado bien y quería ver la cara del policía ver el “pequeño” bulto de la entrepierna de Axel*

Muy embarazoso sería, pero en fin, confié en que no bajara la vista. Salí del coche y me coloqué la camiseta, intentando colocarla a la altura de la cremallera de los vaquers, sin éxito, sólo llegaba hasta el botón. Vale, visto de perfil era una mezcla entre ridiculo y chistoso.

- Por favor, camine en línea recta sobre la línea contínua. -dijo, señalando la línea del arcén y acompañándome hacia ella con el paraguas.

Empecé a caminar mientras el último coche, controlado por otro agente, se marchaba. La carretera estaba desierta ahora, sólo el Mini, con la luz interior encendida, y los dos coches patrulla se distinguían en la noche. Los focos del coche de policía me ayudaban a seguir el camino.
Lo terminé y me puse delante del agente.

- Está bien, puede irse, disculpe las molestias. -mientras se marchaba, hizo un ademán hacia mi entrepierna- Seguro que tendrá una buena noche... -dijo, entre risas ahogadas.

Que tipo tan simpático y capullo. Suspiré. Encima, se había llevado el paraguas. Corrí hacia el coche y me senté, algo mojado, en el asiento. Miré a Mary y arranqué. No estaba enfadado, algo molesto, sí, que niña más vengativa. Pero si ella era cabezota, yo más.

Me quedé en silencio y esbocé una sonrisa. No sabía lo que le esperaba.

*Me estaba riendo a mas no poder dentro del coche viendo a Axel seguir una línea recta con el policía al lado aguantándole el paraguas, era demasiado divertido, eso era un castigo por el calentón, se lo tenía demasiado merecido. Cuando acabó de seguir la línea el policía le dijo algo y después miró su entrepierna y empecé a reírme todavía mas alto, estaba segura de que me estaban escuchando pero me daba igual. Lo vi volver corriendo hacia el coche y meterse dentro mirándome mal mientras me dedicaba una de esas sonrisas suyas de no sabes en el lío que le acabas de meter. Cuando arrancó saqué la cabeza por la ventanilla y grité al policía.*
-¡Debería echar un buen polvo, le quitaría la cara de amargado!
*Me volví a sentar bien en el coche y me puse el cinturón mirando a Axel.*
-Te lo tienes merecido por mala persona.